Desde que Antje von Dewitz es Directora General de VAUDE, no ha dejado de orientarlo todo hacia la sostenibilidad. En su artículo invitado para ISPO.com, nos cuenta a qué retos tiene que enfrentarse, qué medidas son las más eficaces y por qué es optimista de cara al futuro.
Me llamo Antje von Dewitz y tomé el relevo de mi padre como Directora General de VAUDE en 2009. A través de sus primeros proyectos ecológicos de gran alcance, contribuyó a mi convicción de que los negocios sostenibles son posibles y de que las empresas pueden y deben asumir una responsabilidad ecológica. Desde que soy CEO, todo en nuestra empresa se ha orientado sistemáticamente hacia la sostenibilidad: en el emplazamiento, en las cadenas de suministro, en los productos.
En mi artículo invitado para ISPO.com me gustaría darles una idea de nuestra transformación y los retos que conlleva, y animarles a emprender un camino sostenible. Al fin y al cabo, ¡es posible actuar de forma justa y humana como empresa, ser sostenible y alcanzar así el éxito económico!
Cuando iniciamos la transformación hace 15 años, ya éramos conscientes de que pertenecemos a una de las industrias más críticas y, por tanto, tenemos una gran participación en problemas globales como el cambio climático, el consumo de recursos, etc. Es lógico que también tengamos que ser parte de la solución y queramos afrontar este reto. Así pues, es lógico que nosotros también tengamos que ser parte de la solución y queramos asumir esta tarea.
En VAUDE, perseguimos sistemáticamente una estrategia corporativa sostenible con objetivos elevados y ambiciosos. Entre otras cosas, nos hemos comprometido con el Compromiso Detox de Greenpeace o los Objetivos Basados en la Ciencia para hacer nuestra contribución al cumplimiento del objetivo de 1,5 grados según el Acuerdo de París sobre el Clima. Para ello, colaboramos reiteradamente con ONG que no se arredran ante las críticas, como Greenpeace o WWF. Queremos conocer sus exigencias y medirnos con ellas.
Nuestro compromiso puede verse en nuestra etiqueta Green Shape, que ya cumplen casi el 80% de los productos VAUDE. Los productos Green Shape se fabrican de forma justa en instalaciones de producción auditadas, tienen un alto nivel de eficiencia de materiales y están diseñados para ser lo más fáciles de reparar y reciclar posible. Sus materiales están certificados de acuerdo con las normas de sostenibilidad más estrictas y la mayoría son reciclados o de origen biológico. Esto significa que ahorran en torno al 50 % de emisiones en comparación con los materiales nuevos.
De este modo, Green Shape compensa plenamente nuestro compromiso climático y nuestros esfuerzos en torno a la economía circular. En Alemania, desde 2012 somos neutros para el clima gracias al ahorro y la compensación, y esto también se aplicará a nuestros productos fabricados en todo el mundo a partir de 2022.
Trabajamos a toda velocidad para Trabajamos a toda velocidad para seguir reduciendo nuestras emisiones en función de unos objetivos climáticos ambiciosos. Esto sigue siendo un gran reto, especialmente en la producción global y las cadenas de suministro. Para lograrlo, estamos trabajando junto con otras marcas del European Outdoor Group (EOG) en el Proyecto de Descarbonización de la Cadena de Suministro (SCDP), el mayor proyecto de cadenas de suministro neutras desde el punto de vista climático. La verdadera transformación sostenible solo es posible como deporte de equipo, por lo que también colaboramos con otras empresas de toda la cadena de valor en muchas iniciativas y proyectos, por ejemplo en el tema del reciclaje textil.
En la actualidad, sólo se recicla el 1% de todos los textiles del mundo. Para crear una infraestructura que funcione de verdad, todo el mundo tiene que reunirse en una mesa: desde los fabricantes de hilo, los productores de materiales, las marcas y los minoristas hasta los recolectores, clasificadores y recicladores. Todos los participantes en la cadena de valor tienen que conocerse y aprender unos de otros y trabajar por el mismo objetivo. Esto es increíblemente complejo, pero estoy convencido de que el cambio de las condiciones del marco político lo hará posible en los próximos años.
En los últimos 15 años nos hemos vuelto cada vez más políticos como empresa, porque es muy extraño, a la vista de los retos mundiales, que sea mucho más difícil asumir la responsabilidad corporativa que dejarla pasar. asumir la responsabilidad corporativa que dejarla pasar. Actualmente sigue siendo más barato dejar tirado el propio desaguisado que volver a limpiarlo. No es de extrañar que la mayoría de la gente siga creyendo que sostenibilidad y rentabilidad son mutuamente excluyentes. y la rentabilidad económica son mutuamente excluyentes.
La gestión sostenible es posible y me alegro mucho de que ahora se esté creando el marco jurídico paso a paso. Con el Pacto Verde Europeo se establece claramente que la industria textil debe ser reciclable y neutra para el clima en 2050.
En 1994, en realidad, ya habíamos llegado tan lejos una vez. Habíamos lanzado la primera colección de poliéster totalmente reciclable junto con la red de reciclaje Ecolog. Lamentablemente, quince años más tarde la dejamos de fabricar porque, sencillamente, se había adelantado a su tiempo. Con nuestros nuevos productos Rethink a base de PET puro, ahora podemos volver a garantizar que nuestros textiles pueden reciclarse por completo. Con ello ahora cumplimos todos los requisitos de la UE con respecto a un ciclo textil cerrado en estos productos: son duraderos, reciclables, reciclados y libres de sustancias nocivas.
Estoy orgulloso de que en VAUDE hayamos acumulado experiencia en negocios sostenibles. Estamos encantados de compartir esta experiencia, por ejemplo, en el marco de nuestra Academia VAUDE para los negocios sostenibles. para los negocios sostenibles. Porque la transformación sostenible sólo puede hacerse conjuntamente. Nos dirigimos hacia un planeta sobrecalentado y necesitamos tomarnos el cambio climático mucho más en serio. La cooperación genera un cambio real y es divertida. Como empresario Como empresaria, quiero dar impulso y ánimo, por ejemplo, a través de mi perfil de LinkedIn. Lo que me motiva por dentro es poder mirar a mis hijos y nietos a los ojos más tarde y decirles: Lo hemos intentado de verdad.
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