BLACKYAK: Los detalles marcan la diferencia

BLACKYAK todavía es bastante nuevo en el mercado mundial de productos para exteriores, pero ya ha ganado prestigiosos premios con sus tecnologías e innovaciones, y también ha conquistado a muchos aficionados a las actividades al aire libre con los elegantes productos de sus colecciones anteriores.

"Ser diferente" es el lema si se quiere ganar puntos en un mercado en el que los trozos del pastel están realmente repartidos. Este es exactamente el postulado que sigue la marca BLACKYAK de Corea del Sur, apasionada de las actividades al aire libre, desde que entró en el mercado hace dos años. Maximilian Nortz, responsable del desarrollo de la marca en Europa y Norteamérica, es consciente de este reto y se ha propuesto abrir nuevos caminos desde el principio.

"En un mercado en el que triunfan marcas de renombre mundial con productos realmente de primera calidad, hay que esforzarse mucho si quieres dejar huella", así describe Maximilian Nortz sus condiciones de trabajo como Director General de Negocio Internacional.

Sin embargo, desde el principio se guardó en la manga un as que realmente no es típico de una marca procedente de Asia que busca nuevos mercados de venta: un nivel de calidad que constituye una excepción tanto para los europeos, acostumbrados a productos de primera calidad. Porque cuando BLACKYAK se fundó en Corea del Sur en 1973, la única motivación era importar equipamiento para quienes querían conquistar las montañas más altas del mundo.

En aquel momento, la comercialización o incluso la expansión a otro continente ni siquiera formaban parte de la visión. Por el contrario, era la pretensión de dar a los mejores atletas el mejor equipamiento de verdad para que se lo llevaran a la montaña.

Hoy, unas cuatro décadas después, BLACKYAK es una marca que sigue teniendo un toque exótico para los entusiastas de los deportes al aire libre, pero que desde hace tiempo está tan presente en las montañas del mundo como en el entorno urbano. Por un lado, esto se debe al aspecto progresista e individual de las colecciones BLACKYAK.

Por otro lado, se debe a los materiales utilizados y a las tecnologías innovadoras, sobre las que muchos aficionados a los deportes de montaña, así como minoristas especializados y expertos en actividades al aire libre, llevan mucho tiempo debatiendo animadamente. Al fin y al cabo, BLACKYAK es conocido por los detalles que siguen marcando la diferencia incluso cuando, según la opinión popular, el potencial funcional se ha agotado hace tiempo.

"El tema de la innovación forma parte de la esencia de nuestra marca, por eso hemos invertido en investigación y desarrollo al mismo tiempo que en una colección adaptada a Europa", describe Maximilian Nortz el planteamiento estratégico de los últimos años. El elemento central de esta inversión es la estrecha colaboración con la forja de innovación "El desarrollo nunca se detiene" de Adliswil (Suiza).

Aquí, los dos fundadores, Marcel Geser y Thomas Deutschenbaur, se han hecho un nombre interdisciplinario con clientes de diversas industrias por sus textiles funcionales con propiedades excepcionales.

"La colaboración con BLACKYAK es para nosotros la inspiración más pura", afirma Marcel Geser, quien, tras una dilatada experiencia profesional con fabricantes de artículos deportivos, lleva ocho años trabajando por encargo de grandes clientes. Esto se hace en una especie de fábrica en miniatura equipada con todas las máquinas esenciales que -es cierto que en dimensiones diferentes- también se pueden encontrar en las líneas de producción de los grandes fabricantes de productos premium para exteriores. El equipo de diez desarrolladores de la Microfábrica trabaja con cortadoras láser, máquinas de coser y máquinas de overlock en artículos únicos para complejos procedimientos de prueba.

"Aquí podemos fabricar prototipos en muy poco tiempo para luego probarlos a fondo y comprobar su idoneidad práctica con nuestros equipos de atletas, que están constantemente de servicio para nosotros", describe Marcel la típica rutina diaria en DNS. Para ello, se apoya a los atletas en sus expediciones con artículos únicos fabricados con nuevos materiales y nuevas técnicas de procesamiento. "No se puede probar una prenda mejor que en los climas más extremos del planeta", sabe Marcel por experiencia propia. Aquí se crean nuevas tecnologías para BLACKYAK en particular, como un primer lanzamiento, que luego se mejora más y más en elaborados procedimientos de prueba.

Como resultado, las colecciones BLACKYAK sorprenden regularmente con piezas de colección que aportan mejoras notables gracias a un nuevo material, una nueva técnica de procesamiento o un nuevo corte, ya sea en términos de elasticidad, aislamiento o transpirabilidad. Las tecnologías que han permitido a BLACKYAK ganar un total de 17 premios ISPO en los últimos tres años también se desarrollaron en el microlaboratorio suizo.

Además, el equipo de desarrollo de productos de Múnich desarrolló la innovadora tecnología MIDSHELL™, que establece nuevos estándares en transpirabilidad como prenda de tres capas. Además, la tecnología BARRIER® ha sido creada para proporcionar una mayor protección contra las inclemencias del tiempo en las mangas, la cintura y el cuello.

Maximilian Nortz es optimista sobre el futuro de su marca en el mercado internacional, pues sabe que siempre puede dar sorpresas. "Por un lado, sabemos lo expertos en tecnología que son los clientes europeos. De ahí nuestro gran compromiso con la investigación y el desarrollo. Pero igual de importantes son los estilos únicos de nuestras colecciones, con las que siempre marcamos tendencias especiales en cuanto a color y corte".

Porque además de la técnica, Maximilian Nortz se ha fijado otro ambicioso objetivo para triunfar en Europa: "Queremos que el contraste entre la ropa deportiva de montaña altamente funcional y la moda de moda en el entorno urbano pase pronto a la historia".