ISPO Award: Estación de lavado de bicicletas Wintersteiger Velobrush

Como ciclista de montaña, sabrá que limpiar a fondo la bicicleta después de un paseo por el campo puede llevar bastante tiempo. Eliminar la suciedad de la transmisión, la cadena, el cuadro y los neumáticos puede llevar fácilmente entre 20 y 30 minutos. Para los ciclistas aficionados, el tiempo necesario para cuidar su equipamiento deportivo puede no ser un problema.

La situación es completamente diferente en el alquiler comercial de bicicletas o en el taller de servicio de una tienda de bicicletas. Cuando se devuelven todas las bicicletas de alquiler al final del día, hay que revisarlas técnicamente y dejarlas impecables para el día siguiente. Incluso si sólo se ponen a punto diez bicicletas para el día siguiente, esto requiere entre 3 y 4 horas de trabajo, dependiendo del estado de las bicicletas. El esfuerzo y los costes son correspondientemente mayores para las empresas de alquiler más grandes, con una flota de 20 bicicletas de alquiler y más.

La empresa Wintersteiger ha reconocido la necesidad de automatizar la limpieza de las bicicletas. Con el Velobrush, la empresa austriaca ofrece un sistema de lavado totalmente automático para el alquiler profesional de bicicletas y el taller de servicio de una tienda de bicicletas. El sistema limpia hasta 25 bicicletas en una hora. El tiempo que se ahorra en comparación con la limpieza manual es enorme.

Las piezas de las bicicletas, como los frenos, los cambios, las horquillas de suspensión y los amortiguadores, y especialmente la electrónica de las bicicletas eléctricas, son componentes sensibles de alta tecnología. Si se limpian manualmente con una limpiadora de vapor estándar, existe el riesgo de que la alta presión del agua dañe los rodamientos y los componentes. Un cuadro de carbono de alta calidad también requiere una técnica de limpieza que sea suave con el material.

Por ello, el Wintersteiger Velobrush trabaja con una tecnología de cepillado suave y de baja presión. El sistema de limpieza contiene cepillos giratorios colocados verticalmente y una unidad de limpieza separada para neumáticos y llantas. El sistema está diseñado como un sistema cerrado para que no se escape agua durante el proceso de limpieza. El agua utilizada durante el lavado de la bicicleta se limpia mediante un sistema de filtrado y se reutiliza. Esto ahorra recursos y costes.

El funcionamiento del sistema es muy sencillo para el personal de servicio. La bicicleta se traslada a la estación de lavado con la ayuda de un carro de transporte. Esto minimiza la carga de trabajo, ya que no es necesario levantar la bicicleta. Para el proceso de limpieza se dispone de cuatro programas de lavado diferentes, que pueden configurarse individualmente. La instalación, en la que se pueden limpiar todo tipo de bicicletas, está equipada con ruedas.

• Ahorro de tiempo en el servicio de bicicletas: 25 bicicletas por hora
• Funcionamiento sencillo y ergonómico
• Bajo consumo de agua y energía
• Tratamiento y eliminación de aguas residuales respetuosos con el medio ambiente